Con una tasa de 3,7%, Paraguay registró uno de los menores encarecimientos de la canasta básica en América Latina en el 2013, de acuerdo a registros oficiales. Chile, Perú y Colombia también cerraron el año pasado con baja inflación, mientras que Venezuela, con 56% de inflación, y Argentina, con 28%, fueron los campeones (ver infografía).
Analistas locales indicaron
que es muy positivo para el país cerrar con una tasa de inflación baja,
ya que esto trae consigo un efecto rebote para economía, aumentando el
interés de los inversores y a su vez, esto significa mayor fuente
empleo para la mano de obra paraguaya. En otras palabras, la inflación
baja representa previsibilidad para apostar a nuevos proyectos
económicos.
Alberto Acosta Garbarino, banquero y presidente de la Fundación Democracia en Desarrollo (Dende), explicó que es normal que en una economia suba y baje la inflación. “En este sentido, cuando más baja la presión inflacionaria, trae ventajas para la población en general para el país, en este caso, uno de los primordiales beneficios es que reduce la incertidumbre, especialmente en quienes quieren invertir a nivel local”, dijo.
Agregó que la baja inflación también ayuda a que las tasas de interés en el sistema financiero no suba, lo cual anima a los inversores y estimula al consumo interno.
Acosta Garbarino dijo también que sería interesante que el país, continúe con una inflación por debajo del 5%, como proyecta el Gobierno.
A su vez, Gloria Ayala Person, economista y presidenta de Cadiem, casa de bolsa, recordó que cuando menor sea la inflación, se traduce en un menor aumento de precios en los productos que consumen las familias, lo que a su vez implica un freno al espiral inflacionario.
golpea más a los pobres. “En el caso de que aumente la inflación, si el ingreso de una familia fuera el salario mínimo, entonces probablemente gran porcentaje de ese ingreso estará destinado a alimentos, por lo tanto ,un aumento en éste rubro repercutirá principalmente en quienes menos ingresos tienen, afectando la calidad de vida de todos los miembros de esa familia”, explicó la experta.
Fuente: Ultima Hora
Alberto Acosta Garbarino, banquero y presidente de la Fundación Democracia en Desarrollo (Dende), explicó que es normal que en una economia suba y baje la inflación. “En este sentido, cuando más baja la presión inflacionaria, trae ventajas para la población en general para el país, en este caso, uno de los primordiales beneficios es que reduce la incertidumbre, especialmente en quienes quieren invertir a nivel local”, dijo.
Agregó que la baja inflación también ayuda a que las tasas de interés en el sistema financiero no suba, lo cual anima a los inversores y estimula al consumo interno.
Acosta Garbarino dijo también que sería interesante que el país, continúe con una inflación por debajo del 5%, como proyecta el Gobierno.
A su vez, Gloria Ayala Person, economista y presidenta de Cadiem, casa de bolsa, recordó que cuando menor sea la inflación, se traduce en un menor aumento de precios en los productos que consumen las familias, lo que a su vez implica un freno al espiral inflacionario.
golpea más a los pobres. “En el caso de que aumente la inflación, si el ingreso de una familia fuera el salario mínimo, entonces probablemente gran porcentaje de ese ingreso estará destinado a alimentos, por lo tanto ,un aumento en éste rubro repercutirá principalmente en quienes menos ingresos tienen, afectando la calidad de vida de todos los miembros de esa familia”, explicó la experta.
Fuente: Ultima Hora
No hay comentarios:
Publicar un comentario